Francesc Feliu 25/05/2024 (FeliuFins Espácio Jurídico de Derecho Sanitario)

Espero que este vídeo lo vean muchas personas, porque ahora os voy a mostrar lo que dice literalmente el Ministerio de Sanidad en las reclamaciones que estamos haciendo. Vale decir que el tipo de respuesta que están dando no es ninguna novedad para nosotros; estamos totalmente preparados para lo que os voy a enseñar ahora. Por lo tanto, no me es un problema, lo que sí es chocante hasta arriba.

¿Por qué? Porque contradice literalmente todo lo que han venido diciendo, especialmente acordaros cuando decían que las vacunas frente a la COVID-19 eran totalmente seguras y eficaces, pero sobre todo acordaos del tema de la seguridad, cuando te decían que como mucho ibas a tener un poco de dolor de cabeza, un poco de malestar general o un poco de hinchazón en la zona donde se te inoculaba. Vamos a ver si realmente esto es así. Reclamación, respuesta, Ministerio de Sanidad, una reclamación contra AstraZeneca. Podemos poner aquí Pfizer, Moderna, da igual. Tenemos más de lo mismo; aquí la que os enseño es de AstraZeneca. Vamos a ver lo importante.

Como sucede con el resto de medicamentos, las vacunas pueden provocar reacciones adversas. En el momento de la autorización de un medicamento, incluidas las vacunas frente a la COVID-19, el conocimiento del perfil de seguridad es relativamente limitado. Luego habla de los factores, porque se puede ser limitado en un reducido número de personas que participan en los ensayos clínicos, su limitada duración y seguimiento y las restricciones al tipo de personas que participan en los mismos.

Pero fijaos, el conocimiento del perfil de seguridad es relativamente limitado. ¿Qué? Limitadísimo. Aquí lo dicen, pero cuando salieron a decir que la vacuna era segura, se hincharon a decir que era completamente segura y que no había ningún peligro para nadie. Cosa que ahora, como veis, nos dicen lo contrario, que se conocía relativamente. Vamos a otra sorpresa. En el caso de la vacunación frente a la COVID-19, los reclamantes se sometieron a la misma voluntariamente en consonancia con la ley, y prestaron su consentimiento verbal por regla general, teniendo a su alcance la información que en ese momento estaba recogida en los correspondientes prospectos publicados de cada una de las vacunas.

Ya para flipar. Primero te dice que las personas que se vacunaron lo hicieron voluntariamente. Que yo sepa, de voluntario, esto no tuvo nada. Ya sabéis, por el estado de COVID, la persecución directa a la gente que no se vacunaba. ¿Qué os voy a decir que no sepáis? Luego, según otra sorpresa, prestaron su consentimiento, dice verbal por regla general. ¿Hay alguien que haya dado su consentimiento de manera escrita? Voy a poner un amplio espectro geográfico, desde Melilla hasta los Pirineos, a ver si alguien ha recibido el prospecto escrito. Ya veréis como nadie lo tiene, porque no se dio.

Y tercero, te hablan de que teníais la información que se suministró al alcance de todo el mundo, incluso que estaba en los prospectos. ¿Alguien vio algún prospecto? ¿Alguien vio el prospecto? Los que nos dedicamos al tema de responsabilidad sanitaria, como es mi caso, sabemos perfectamente que hay que mirar los prospectos, pero yo soy profesional. Mi dedicación es esa. En 23 años, ¿cómo no lo voy a saber? Pero la gente de a pie, que le decía al político de turno, la autoridad competente de turno, que la vacuna era segura y que se creyeron el discurso.

Ahora os dicen que os vacunasteis voluntariamente, que el consentimiento fue totalmente el que disteis y que la información, bueno, pues ahí estaba, que la podíais mirar perfectamente. Impresionante. Sigo.

En estos casos, debe concluirse que no existe una infracción de la Lex Artis, que es lo que decimos comúnmente como negligencia, porque, y aquí nos habla del estado de la ciencia, que no se podía conocer en ese momento. Ahora vemos como el Ministerio de Sanidad está reconociendo, pues gente fallecida, que se había vacunado. Bueno, salen las resoluciones de resoluciones.

Yo de estas tengo decenas, literal decenas y no es un problema y vuelvo a insistir. Sabemos que la administración tira la piedra y luego esconde la mano. Lo hace en este tipo de temas y lo hace en todo, porque el deporte nacional de este país, después del fútbol, es esto: saltarse a la torera a la gente y no reconocer sus derechos.

Os lo quería enseñar para que lo vierais, para que tuvierais constancia de que a veces en los vídeos lo explicamos, pero aquí tenéis la prueba gráfica y también que sepáis que sabemos cómo combatir esto desde hace tiempo. Ya sabemos cómo lidiar con esto. Pues ya veis la respuesta del Ministerio de Sanidad, aquí la tenéis y a seguir luchando contra la administración, porque al final el objetivo, como ya he dicho en otras ocasiones, para mí es la administración y así debe ser.